Salmo 15 Completo y Con Explicación
Introducción al Salmo 15
El Salmo 15 es un salmo davídico (Salmo de David), clasificado a menudo como una "liturgia de entrada" o "código de santidad". Se presenta como una pregunta y respuesta solemne: "¿Quién habitará en tu tabernáculo?" (v. 1). Su propósito central no es meramente enumerar reglas, sino describir el carácter integral y la conducta ética que deben adornar a aquellos que buscan la presencia íntima de Dios en Su monte santo. Este salmo establece los estándares inmutables de justicia y verdad que Dios espera de Su pueblo.
Salmo 15 Completo
1.Salmo de David.
2.1 Jehová, ¿quién habitará en tu tabernáculo?
3.¿Quién morará en tu monte santo?
4.2 El que anda en integridad y hace justicia,
5.y habla verdad en su corazón.
6.3 El que no calumnia con su lengua,
8.ni admite reproche alguno contra su vecino.
9.4 Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado,
10.pero honra a los que temen a Jehová.
11.El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia;
12.5 Quien su dinero no dio a usura,
13.ni contra el inocente admitió cohecho.
14.El que hace estas cosas, no resbalará jamás.
Explicación del Salmo 15
Este salmo comienza con una pregunta retórica (v. 1) que busca identificar al verdadero adorador, aquel apto para entrar en la presencia sagrada de Dios (el "tabernáculo" o el "monte santo", Sión). La respuesta (vv. 2-5) es una serie de requisitos éticos y sociales que definen la piedad genuina, la cual es inseparable de la rectitud moral. El versículo 2 resume el requisito fundamental: andar en integridad (ser completo, sin doblez), hacer justicia (rectitud en acción) y hablar verdad desde el corazón (sinceridad interna). Los versículos 3 y 4 enumeran la conducta relacional. El adorador debe abstenerse de la calumnia y el daño social, protegiendo la reputación del prójimo (v. 3). Además, debe poseer discernimiento moral: rechazar la maldad ("el vil es menospreciado") y honrar la piedad ("honra a los que temen a Jehová"). Una señal crucial de integridad es mantener la promesa incluso cuando resulta costoso personalmente ("aun jurando en daño suyo, no por eso cambia"). El versículo 5 aborda la ética económica, condenando la usura (intereses excesivos) y el soborno o cohecho contra el inocente. Estos eran abusos comunes que destruían la comunidad. La conclusión es una promesa de estabilidad: el que vive de esta manera "no resbalará jamás". Históricamente, este salmo sirvió para recordar a los israelitas que el ritual sacrificial era inútil sin una vida de justicia práctica.
Reflexión del Salmo 15
El desafío del Salmo 15 para la era moderna es que la verdadera espiritualidad se mide por la calidad de nuestras relaciones y nuestra conducta en el mercado, no solo por nuestra asistencia al templo. La pregunta "¿Quién habitará?" se traduce hoy en: ¿Estamos viviendo de tal manera que reflejamos el carácter de Cristo en todas las áreas de nuestra vida? La integridad se pone a prueba en las redes sociales, donde la calumnia y el reproche se propagan fácilmente, y en nuestras finanzas, donde la honestidad puede verse comprometida por la codicia. Si deseamos experimentar una comunión inquebrantable con Dios, debemos examinar si nuestra lengua es veraz, si nuestras promesas son firmes, y si tratamos a nuestro prójimo con la justicia y el respeto que Dios demanda. El Señor no pide perfección instantánea, sino un corazón que se esfuerza constantemente por "andar en integridad", confiando en que por la gracia de Cristo podemos alcanzar el estándar de Su santidad.
Oración Basada en el Salmo 15
Oh, Padre Celestial, Tú que habitas en el monte de la santidad, humillamos nuestros corazones ante Ti. Reconocemos que a menudo hemos fallado en andar en integridad y hemos permitido que la calumnia o la codicia manchen nuestros caminos. Te ruego, Señor, que nos concedas un corazón que ame la verdad y aborrezca el mal. Ayúdanos a ser fieles a nuestras promesas, a hacer justicia a nuestro prójimo y a honrar siempre a aquellos que te temen. Que nuestra vida, en cada acción y palabra, sea un reflejo digno de aquellos que buscan morar eternamente en Tu presencia. En el nombre de Jesús. Amén.