Salmo 34 Completo y Con Explicación
Introducción al Salmo 34
El Salmo 34 es un himno de acción de gracias y sabiduría atribuido al rey David. La superescripción indica que fue compuesto después de que David fingiera estar loco delante de Abimelec (Aquis, rey de Gat), un momento de profunda desesperación donde buscó refugio y experimentó la liberación divina (1 Samuel 21:10-15). Este salmo es un acróstico (estructurado según el alfabeto hebreo) y su tema central es la glorificación de Dios por su protección incesante a los justos y la invitación ferviente a experimentar Su bondad.
Salmo 34 Completo
1.Bendeciré a Jehová en todo tiempo;
2.sin cesar estará su alabanza en mi boca.
3.En Jehová se gloriará mi alma;
4.Lo oirán los mansos, y se alegrarán.
5.Engrandeced a Jehová conmigo,
6.Y exaltemos a una su nombre.
7.Busqué a Jehová, y él me oyó,
8.Y me libró de todos mis temores.
9.Los que miraron a él fueron alumbrados;
10.Y sus rostros no fueron avergonzados.
11.Este pobre clamó, y le oyó Jehová,
12.Y lo libró de todas sus angustias.
13.El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen,
14.Y los defiende.
15.Gustad, y ved que es bueno Jehová;
16.Dichoso el hombre que confía en él.
17.Temed a Jehová, vosotros sus santos,
18.Pues nada falta a los que le temen.
19.Los leoncillos necesitan, y tienen hambre;
20.Pero los que buscan a Jehová no tendrán falta de ningún bien.
21.Venid, hijos, oídme;
22.El temor de Jehová os enseñaré.
23.¿Quién es el hombre que desea vida,
24.Que desea muchos días para ver el bien?
25.Guarda tu lengua del mal,
26.Y tus labios de hablar engaño.
27.Apártate del mal, y haz el bien;
28.Busca la paz, y síguela.
29.Los ojos de Jehová están sobre los justos,
30.Y atentos sus oídos al clamor de ellos.
31.La ira de Jehová está contra los que hacen mal,
32.Para cortar de la tierra la memoria de ellos.
33.Claman los justos, y Jehová oye,
34.Y los libra de todas sus angustias.
35.Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón;
36.Y salva a los contritos de espíritu.
37.Muchas son las aflicciones del justo,
38.Pero de todas ellas le librará Jehová.
39.Él guarda todos sus huesos;
40.Ni uno de ellos será quebrado.
41.Matará al malo la maldad,
42.Y los que aborrecen al justo serán condenados.
43.Jehová redime el alma de sus siervos,
44.Y no serán condenados cuantos en él confían.
Explicación del Salmo 34
El Salmo 34 puede dividirse en tres secciones. Los versículos 1-7 son el testimonio de David. Comienza con una resolución inquebrantable de alabar a Dios sin importar las circunstancias (v. 1), un reflejo de su liberación milagrosa del peligro. Su testimonio es un llamado a otros, especialmente a los “mansos” (los humildes y afligidos), para que se unan a su alabanza. Él relata cómo, al buscar a Jehová, fue librado no solo de los peligros físicos, sino también de sus "temores" (v. 4, refiriéndose a la ansiedad de su huida). Los versículos 8-10 contienen la invitación central. La frase: "Gustad, y ved que es bueno Jehová" (v. 8) es un reto experiencial. Dios no se conoce solo a través del intelecto, sino a través de la vivencia personal de Su fidelidad. El temor de Jehová aquí es entendido como una reverencia santa que asegura la provisión y evita la escasez espiritual o material, contrastándolo con el hambre de los leoncillos. Los versículos 11-22 son una enseñanza sapiencial sobre cómo vivir la vida que honra a Dios. David instruye sobre el camino para "ver el bien" (v. 12): requiere control de la lengua (v. 13), huir del mal y buscar activamente la paz (v. 14). El salmo concluye reafirmando la justicia de Dios: mientras Él está atento al clamor de los justos (v. 15) y cerca de los "quebrantados de corazón" (v. 18), la ira y el juicio caerán sobre los malvados. La promesa final (v. 19-22) es la garantía de la redención; aunque el justo experimente aflicción, Dios asegura su liberación y protección completa, tal como se profetiza en el Nuevo Testamento que ni uno de los huesos del Mesías sería quebrado (Juan 19:36, citando implícitamente el v. 20).
Reflexión del Salmo 34
La aplicación moderna del Salmo 34 radica en cómo manejamos la ansiedad y el sufrimiento. David nos enseña que el camino hacia la paz interior comienza con una decisión de alabanza incondicional. Cuando clamamos a Dios, no solo buscamos la solución a un problema, sino que buscamos la liberación de los temores que nos paralizan. Estamos llamados a pasar de la teoría a la práctica, a 'gustar' la bondad de Dios, confiando en Su provisión total. En la vida contemporánea, donde el quebranto emocional y espiritual es común, el versículo 18 nos ofrece un bálsamo poderoso: Dios se acerca precisamente a aquellos que se sienten destrozados y sin esperanza. La verdadera vida de fe es una búsqueda activa de paz (v. 14) y una disciplina consciente de la integridad moral (guardar la lengua). Reconocer que las aflicciones son parte de la vida del justo, pero que la promesa de redención final es segura, nos permite afrontar las pruebas con gozo, sabiendo que nuestra alma está en manos del Redentor.
Oración Basada en el Salmo 34
Oh, Padre Celestial, Dios de nuestra liberación, te bendigo en todo tiempo, y sin cesar estará Tu alabanza en mi boca. Te agradezco porque Tú eres mi refugio y mi defensor. Reconozco que a veces me encuentro lleno de temores, pero hoy busco Tu rostro para ser alumbrado y librado de toda angustia. Te ruego, Señor, que me enseñes Tu santo temor, que es el principio de la sabiduría y la fuente de toda provisión. Dame la gracia para guardar mi lengua del mal y para buscar la paz activamente en mi vida diaria. Mantente cercano a mi corazón, especialmente en los momentos de quebranto, para que pueda gustar y ver que Tú eres eternamente bueno. Redime mi alma, oh Jehová, y que mi confianza en Ti nunca me avergüence. Amén.