Salmo 31 Completo y Con Explicación
Introducción al Salmo 31
El Salmo 31 es una profunda oración de David que encapsula el movimiento de la fe, pasando de la angustia más profunda a una renovada declaración de confianza en la fidelidad de Dios. Es un salmo de lamentación individual que se transforma en un cántico de alabanza. El tema central es la confianza total en la protección de Dios (Jehová) frente a la adversidad, la traición social y la desesperación física. Este salmo es de especial significado, ya que Jesús citó el versículo 5 ("En tu mano encomiendo mi espíritu") al morir en la cruz, demostrando la confianza máxima en el Padre.
Salmo 31 Completo
2.Salmo de David.
3.1 En ti, oh Jehová, he confiado; no sea yo avergonzado jamás;
4.Líbrame en tu justicia.
5.2 Inclina a mí tu oído, líbrame pronto;
6.Sé tú mi roca fuerte, y fortaleza para salvarme.
7.3 Porque tú eres mi roca y mi castillo;
8.Por tu nombre me guiarás y me encaminarás.
9.4 Sácame de la red que han escondido para mí,
10.Pues tú eres mi refugio.
11.5 En tu mano encomiendo mi espíritu;
12.Tú me has redimido, oh Jehová, Dios de verdad.
13.6 Aborrezco a los que esperan en vanidades ilusorias;
14.Mas yo en Jehová he confiado.
15.7 Yo me alegraré y me regocijaré en tu misericordia,
16.Porque has visto mi aflicción;
17.Has conocido mi alma en las angustias.
18.8 No me entregaste en mano del enemigo;
19.Pusiste mis pies en lugar espacioso.
20.9 Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy en angustia;
21.Se han consumido de tristeza mis ojos, mi alma y mi cuerpo.
22.10 Porque mi vida se va gastando de dolor, y mis años de suspirar;
23.Se agotan mis fuerzas a causa de mi iniquidad,
24.y mis huesos se han consumido.
25.11 De todos mis enemigos soy objeto de oprobio,
26.y de mis vecinos mucho más, y terror a mis conocidos;
27.Los que me ven fuera huyen de mí.
28.12 He sido olvidado de su corazón como un muerto;
29.He venido a ser como vasija rota.
30.13 Porque he oído la calumnia de muchos;
31.El miedo me asalta por todas partes,
32.Mientras consultan juntos contra mí
33.e idean quitarme la vida.
34.14 Mas yo en ti confío, oh Jehová;
35.Digo: Tú eres mi Dios.
36.15 En tu mano están mis tiempos;
37.Líbrame de la mano de mis enemigos y de mis perseguidores.
38.16 Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo;
39.Sálvame por tu misericordia.
40.17 No sea yo avergonzado, oh Jehová, ya que te he invocado;
41.Sean avergonzados los impíos, estén mudos en el Seol.
42.18 Enmudezcan los labios mentirosos,
43.Que hablan cosas duras contra el justo,
44.Con soberbia y menosprecio.
45.19 ¡Cuán grande es tu bondad, que has guardado para los que te temen,
46.Que has mostrado a los que esperan en ti, delante de los hijos de los hombres!
47.20 En lo secreto de tu presencia los esconderás de la conspiración del hombre;
48.Los pondrás a cubierto en un pabellón de la contención de lenguas.
49.21 Bendito sea Jehová,
50.Porque ha hecho maravillosa su misericordia para conmigo en ciudad fortificada.
51.22 Decía yo en mi apresuramiento: Cortado soy de delante de tus ojos;
52.Pero tú oíste la voz de mis ruegos cuando clamé a ti.
53.23 Amad a Jehová, todos vosotros sus santos;
54.Pues Jehová guarda a los fieles,
55.Y castiga con creces al que actúa con soberbia.
56.24 Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová,
57.Y tome aliento vuestro corazón.
Explicación del Salmo 31
El Salmo 31 se puede dividir en tres secciones principales que reflejan el viaje espiritual del salmista: 1. Súplica y Confianza Inquebrantable (vv. 1-8): David comienza estableciendo el fundamento de su fe. No pide liberación basándose en sus méritos, sino en la justicia (fidelidad pactual) de Dios. Invoca a Dios como su 'roca', 'castillo' y 'refugio' (imágenes de seguridad inexpugnable). El punto cúspide es el versículo 5, donde encomienda su espíritu. Este acto de entrega total, incluso ante la amenaza de muerte, afirma que su vida (y destino eterno) está segura en el Dios de verdad, a diferencia de aquellos que confían en 'vanidades ilusorias'. 2. Lamento y Agonía Extrema (vv. 9-18): El tono cambia drásticamente para describir la magnitud del sufrimiento. David detalla su aflicción, que no es solo externa, sino que afecta su salud física (ojos, alma, cuerpo consumidos) y su reputación social. Él se siente como 'vasija rota' (v. 12), totalmente desechado y calumniado, lo que sugiere un momento de intensa persecución política o personal. Sin embargo, en medio del terror (v. 13), reitera su confianza: "Tú eres mi Dios" (v. 14). La frase "En tu mano están mis tiempos" (v. 15) es una entrega teológica clave, reconociendo la soberanía de Dios sobre su destino y cronología. 3. Alabanza, Testimonio y Exhortación (vv. 19-24): El salmo experimenta su giro dramático. Habiendo clamado y entregado su vida, David se regocija anticipadamente en la bondad (Hèsed) de Dios. Exalta la provisión divina de protección secreta ("En lo secreto de tu presencia los esconderás", v. 20) contra la conspiración de los hombres. Tras testificar que Dios lo oyó incluso cuando se sentía cortado (v. 22), el salmo concluye con una poderosa exhortación a toda la comunidad de creyentes: Amar a Jehová, pues Él "guarda a los fieles" y recompensa la paciencia con fortaleza (v. 24).
Reflexión del Salmo 31
La vida moderna, llena de incertidumbre y de rápidas traiciones (a menudo en plataformas digitales), puede hacernos sentir como la 'vasija rota' que David describe. La reflexión fundamental de este salmo es cómo mantener la confianza cuando la evidencia sensorial o social clama lo contrario. David nos enseña que, en medio de la soledad, el dolor físico o la calumnia, nuestro punto de anclaje no debe ser la resolución inmediata de nuestros problemas, sino la soberanía de Dios. El versículo 15, "En tu mano están mis tiempos", es un bálsamo para la ansiedad. Nos recuerda que no somos dueños del tiempo ni de los resultados, sino que nuestro destino, nuestro propósito y nuestro calendario están bajo el control amoroso del Creador. Cuando nos sentimos olvidados, el salmo nos invita a imitar la entrega de Jesús y David, encomendando nuestro espíritu y nuestros 'tiempos' a Aquel que es el 'Dios de verdad' (v. 5). La fortaleza final (v. 24) no proviene de nuestra propia resiliencia, sino de la expectativa activa en la bondad inagotable de Dios.
Oración Basada en el Salmo 31
Oh Jehová, Dios de verdad y Roca inmutable, en este día clamo a ti. Te confieso que a menudo mis fuerzas se agotan, mi alma se angustia por las tristezas y a veces me siento como vasija rota, desechado y olvidado. Perdona mi apresuramiento cuando dudo de tu presencia. Padre, te entrego mi espíritu, mi futuro y mis luchas. En tu mano encomiendo mis tiempos. Sé mi castillo, mi fortaleza contra las redes que el enemigo ha tendido. Que tu misericordia sea mi refugio seguro. Concede que mi corazón tome aliento y se esfuerce en esperar en ti, tal como hiciste maravillosa tu bondad con David. Líbrame de los labios mentirosos y guárdame en el secreto de tu presencia. Que mi vida sea un testimonio de la fidelidad de tu Hèsed. Amén.